
La Solución Detrás de La Logística de Frubana
Amanecía en Ciudad de México y nuevamente nos habíamos levantado temprano para ir a la central de distribución con Frubana.
Durante mis vacaciones en Bogotá me le medí a ir a la central de abastos con Carlos Sierra (fundador de Twnel) y Miguel Silva (jefe de producto de Frubana) y les conté que al final de día descubrí que las experiencias como esa enseñan más que cuatro años en la Universidad y dos maestrías.
Esta vez fuimos a México a seguir aprendiendo de los expertos.
No, esta vez no son los fundadores de Frubana, son los conductores y las personas de carga distribución de los productos en bodega. Debo confesar que el haber podido haber estado un día en la vida de estas personas me dejó varias lecciones que hoy comparto con ustedes.
A las 4 de la mañana quedamos de vernos en la bodega con Alfredo, uno de los conductores aliados de Frubana para distribuir los pedidos en CDMX. A pesar del sueño, esta vez si llegamos a tiempo para verlo.

No tomó mucho tiempo para darme cuenta de que Alfredo era la representación del mexicano buena gente del que todo el mundo habla.
Tampoco tomó mucho tiempo para que el corre corre de las personas al interior de la bodega nos hiciera sentir un tanto estorbosos un par de veces. A pesar del afán de todo el personal, cada uno de ellos se tomó el tiempo para dejarnos saber cómo era el funcionamiento y la logística que implica cargar todos los camiones con los diferentes pedidos del día.
Una vez terminamos el recorrido por bodega, Alfredo nos invitó a su camioneta para comenzar el recorrido. Así fue como junto con cerca de 500 kilos de comida en la parte trasera y un olor a mandarina partimos hacia nuestra primera parada.
Un lugar donde aprenderíamos nuestra primera lección.
Es evidente que para Alfredo Frubana no era solo una de las empresas a la que le prestaba sus servicios. Frubana se había convertido en motivo de orgullo, tanto que a pesar de no trabajar directamente para ellos estaba dispuesto a marcar su camión con el logo de la empresa.
Me pregunté en ese momento cómo lograr ese efecto en otras empresas y luego me di cuenta de una cosa.
El orgullo de Alfredo había nacido de la relación que tenía con Frubana, relación que se cultivó a lo largo del tiempo por medio del uso de Twnel.
Pretendiendo que no sabíamos de lo que hablaba, dejamos que nos contara cómo era su relación con Frubana. No les mentiría si les digo que pasé parte de mi día al escribir este artículo recortando el video de Alfredo hablando.
Nos contó de sus ideas para mejorar la plataforma, los problemas que tenía a diario y cómo lo mejor de trabajar con Frubana era la respuesta rápida de los agentes de servicio al cliente.
Para cuando terminó de contarnos el día a día de su trabajo llegamos a un restaurante en el que nos recibieron con jugo de naranja.
Mientras descargaban las cajas, Carlos logró captar el momento en el que Alfredo entregó el pedido y la persona encargada del restaurante firmó la entrega directamente desde el celular.
Una vez entregado el dinero, Alfredo le tomó una foto a la factura y la envió a Frubana sin necesidad de ir al banco o hacer filas. Fue conveniente y extremadamente fácil para él y para el cliente que recibió los productos en el restaurante.
Al ver eso aprendí la segunda lección:
El hacerlo no solo optimiza las operaciones de la empresa, sino que mejora el día de personas como Alfredo. Cuyo día, así como el nuestro apenas comenzaba y no lo sabíamos.
Al dejar el restaurante, nos encontramos con uno de los problemas más comunes en esta industria.Las direcciones están mal y los conductores deben salir y preguntar casi que de puerta en puerta donde es el restaurante donde deben entregar el pedido.
Ese día por fortuna estábamos en lo que en palabras de Alfredo era una zona segura de la ciudad. Esto no siempre es así y representa un riesgo para los conductores a la hora de entregar ya que deben estacionar o parar la ruta y comenzar a preguntar por el lugar.
Sin esperarlo, llegó lo que para mí es una de las lecciones más valiosas del viaje.
Crea una relación tan estrecha con tus aliados que tengan la confianza para aportar sus propias ideas de cómo mejorar el producto.
Recuerdo que durante la reunión en Bogotá con los “duros” de Frubana, hablamos de los problemas más comunes que tenían los conductores. Así que hicimos una pequeña lluvia de ideas sobre SuperBots de Twnel que pudieran solucionarlos.
En esta ocasión, estábamos escuchando a viva voz el dolor de los conductores. Esta vez en la voz de Alfredo, quien como antes no dudó en contarnos toda la historia.
Estoy segura de que después de todo lo que aprendí en México, tanto Frubana como Twnel van a implementar cambios que reflejen la experiencia con Alfredo.
Nos llevamos de México grandes lecciones, un amor adquirido por la comida picante y un aprecio inmenso por las personas que se dedican a evangelizar a Twnel sin saberlo.